Comenzamos el año mostrándoos un resumen de esta reforma que hemos terminado hace bien poquito en Orio. Cuando X&A nos visitaron tenían claro que querían un cambio radical en la distribución de su casa pero manteniendo el estilo clásico-rústico que tanto les gusta.
Son una familia con tres hijos y necesitaban tener el espacio muy bien organizado para poder aprovechar al máximo cada rincón, toda la capacidad posible en todas las estancias de la casa y muchísima luminosidad. Reunimos todas sus ideas y las juntamos con las nuestras, nos pusimos manos a la obra para crear la distribución perfecta.
Antes de la obra, la cocina estaba en el lugar del dormitorio 1, decidimos cambiarla de sitio y ponerla al lado del salón para que tuviera más luz y así sacarla de la zona más privada de la casa. Pusimos un cerramiento acristalado para que visualmente quedara abierto ganando en amplitud y dejando que pasara la luz pero no los olores.
Siguiendo con la distribución, los tabiques que separan el resto de dormitorios se modificaron de sitio para proporcionar las medidas de las habitaciones y para sacar armarios empotrados en dos de ellas.
El baño 2 estaba colocado donde ahora está puesta parte de la despensa y la lavandería. Ese espacio que nos queda, lo hemos aprovechado para almacenaje (despensa) y zona de lavado en el pasillo (lavandería).
Una vez decidida la distribución, comenzamos con la elección de colores y acabados. Debíamos mantener su estilo, ya que iban a mantener parte de los muebles que ya tenían y debían quedar integrados. Nos decantamos por un rústico renovado en general menos en las habitaciones de los niños, preferían poner muebles de líneas muy sencillas y lo mínimo posible. La paleta de colores fue en tonos neutros combinando con madera en un tono muy natural y con algún azul escandinavo en diferentes intensidades.
Para el color general de la casa (pasillos, salón y cocina) elegimos un tostado muy clarito para que hubiera un mínimo de contraste con las puertas de la casa y que así diera calidez. Para las habitaciones más juveniles elegimos un azul escandinavo muy claro en dos tonalidades.
La Cocina
La disposición en «L» en este caso era la más acertada. Queríamos que tuviera capacidad pero lo más importante era que todo estuviera a mano, que hubiera una buena zona de cocción ya que siempre cocinaban con varios fuegos a la vez. Pusimos una placa de inducción de 90cm comunicada con la campana, para que cada vez que empiecen a cocinar la extracción funcione a la vez y no se acumule el humo. Al lado de la placa hay una amplia zona de trabajo y a continuación una de lavado. El resto es todo mobiliario para almacenar utensilios de cocina y los alimentos más utilizados.
Elegimos el color blanco en los muebles para que mantuviera la luminosidad y cuidamos el resto de detalles para mantener el estilo y hacerla más especial.
Pusimos el tirador concha en plata envejecida para los frentes del mueble, la cerámica de estilo retro en tonos pastel y la encimera de Dekton en color tostado a juego con el suelo y con uno de los colores de la pared. Únicamente azulejamos las paredes donde se iba a colocar el mueble, el resto iría pintado en el tono general de la casa. Todos estos detalles junto con el grifo de estilo antiguo y unos cajones de madera serían lo que daría encanto a la cocina…
El Baño 1
¡¡Teníamos muy claro que era una ocasión especial y que debíamos aprovechar!!
Por eso en los baños quisimos hacer algo diferente, algo más especial.
«X» es azulejador de profesión y era la ocasión perfecta para que se luciera, escogimos con algo de miedo un azulejo con forma de escama. Eran piezas individuales y requiere el doble de trabajo para colocarlas, paciencia y mucho cariño. Eran perfectas para «X» pero no sabíamos como iba a reaccionar… era probable que pensara que nos habíamos vuelto locos y que nos tirara las escamas a la cabeza.
Y así fue… más o menos, no nos tiró nada pero resopló, resopló muchísimo, necesitaba asimilar lo de las escamas de colores en la bañera… normal! A mi me parecía una idea maravillosa que ya tenía muchas ganas de poner hace tiempo pero descarté la idea al ver su cara en aquel mismo momento.
No quería las escamas… no pasa nada «X»! Elegiremos un azulejo más normal, más corriente pero que también quedará bien… al segundo panel de cerámica me pidió volver a ver las escamas; «Oye, enséñame mejor eso de las escamas… quiero verlas de nuevo» .
¿Os imagináis que es lo que pusimos verdad?
Queríamos que fueran las protagonistas en este baño, así que el resto de elementos fueron en tonos blancos y línea rústica, tanto en el mueble como en la grifería.
El Baño 2
Aquí ya fue más fácil, con esto de las escamas nos habíamos venido arriba y también iba a ser otro reto el azulejar. Un azulejo hidráulico iba a ser el protagonista pero no teníamos muy claro cuál.
Barajamos varias opciones para el suelo pero para la pared tenía que ser tipo barro esmaltado y en color. Eligieron un gris antracita combinando varios formatos diferentes, otra currada más para azulejar, además de un borde irregular que lo complicaba todavía más. A «X» no le importaba, era su casa y estaba disfrutando mucho con la elección…
En cambio «A» estaba más tranquila eligiendo con indecisión pero con mucha emoción todos los materiales, la dificultad para azulejar no le preocupaba demasiado ya que tenía claro que su marido era muy fino en su trabajo. Ella tenía miedo con el color oscuro pero el conjunto de todo le gustaba mucho y confiaba ciegamente en lo que le decíamos. «Si me decís que va a quedar bien… yo me fío y me quedo tranquila. No necesito más!».
Ya que iba todo en tonos grises, elegimos un mueble en madera clara para darle calidez y un gran espejo redondo para darle amplitud y luminosidad. Detrás de la puerta se encuentra la ducha y un pequeño armario para las toallas.
Los Dormitorios.
En el dormitorio principal iban a mantener sus antiguos muebles, sólo necesitaban un armario. Como el mobiliario era de línea clásica y en un color de madera muy difícil de combinar, no queríamos meter una tercera madera en la habitación. Quisimos que el armario fuera lo más sencillo posible y que diera más sensación de pared que de armario. Conclusión: puertas blancas y lisas con un tirador «pestaña» que apenas se ve.
En el dormitorio de la niña también mantenían los muebles de antes así que solo teníamos que amueblar los dormitorios de los dos niños. Nos pidieron algo sencillo y muy simple pero esta vez de línea más moderna. Los armarios fueron exactamente igual en los tres dormitorios, les gustaba la idea y no querían cambiarla.
En la zona de cama pusimos una mesilla con cajones y unos paneles a modo de cabecero forrando la pared, para protegerla del roce y que no hubiera que volver a pintar en menos de un año… Para terminar creamos dos zonas de estudio con una mesa en forma de «L» invertida y una pequeña estantería. Las mesas son de color gris antracita para que tengan mejor vejez y que así den un toque diferente a las habitaciones.
Esperamos que hayáis disfrutado tanto como nosotros con el resultado. Desde aquí queremos agradecer a «X&A» que hayan depositado su confianza en nosotros desde el primer momento. Ha sido un placer trabajar junt@s… mil gracias!!!!
¡Hasta pronto!
Urko Zeraleku Hogar 